“Ricardo Bidó, comandante de Azua, herido en secuestro y trasladado a Santo Domingo”
Ricardo Bidó, comandante de la cárcel conocida como "El 15" en Azua, fue trasladado de urgencia al Hospital General de la Policía Nacional en Santo Domingo luego de haber sido inicialmente atendido en el Centro Médico Popular Azuano. Esto ocurrió tras un incidente en el que el coronel fue víctima de un secuestro mientras se encontraba en su oficina, acompañado de otro agente penitenciario.
El ataque sucedió cuando un recluso, cuya identidad no ha sido revelada en los reportes oficiales, tomó a Bidó como rehén y lo hirió de bala. La respuesta de los agentes policiales fue inmediata, logrando abatir al agresor en el transcurso de la operación de rescate, poniendo fin a una situación que representaba un grave riesgo para la vida del coronel y de los demás involucrados.
Según los informes, el secuestro ocurrió en medio de un ambiente de tensión dentro del penal. Las autoridades, alertadas sobre la gravedad de los hechos, actuaron rápidamente para movilizar a las fuerzas de seguridad y neutralizar la amenaza.
El capitán Wilkin Méndez, cirujano general, ofreció detalles sobre la condición médica de Bidó, indicando que el coronel ingresó al Centro Médico Popular Azuano con tres heridas de bala. Luego de ser estabilizado, fue trasladado al Hospital General de la Policía Nacional en la capital, donde sigue recibiendo tratamiento especializado.
Este violento suceso ha generado conmoción dentro de la cárcel del 15 de Azua, un centro penitenciario ya conocido por su complejidad y altos niveles de seguridad. Las autoridades han iniciado una investigación exhaustiva para determinar las causas detrás del secuestro y el ataque perpetrado por el recluso, con el fin de prevenir futuros incidentes similares.
Además de la investigación en curso, las autoridades han subrayado la importancia de fortalecer las medidas de seguridad en la cárcel, buscando evitar que se repitan situaciones de esta índole, que no solo ponen en peligro la vida de los agentes y funcionarios penitenciarios, sino que también afectan la estabilidad dentro del penal.
En cuanto al estado de salud de Ricardo Bidó, los equipos médicos en Santo Domingo continúan monitoreando su evolución, esperando que su recuperación sea favorable. Este caso pone en evidencia los riesgos constantes que enfrentan los miembros del sistema penitenciario en el cumplimiento de su labor diaria, resaltando la necesidad de implementar medidas que garanticen su seguridad en el ejercicio de sus funciones.