Posible caso de viruela del mono genera alarma en Los Praditos
La tranquilidad habitual de Los Praditos, un sector popular de Santo Domingo, se ha visto interrumpida por la alarma que ha generado la posible aparición de un caso de viruela del mono. Un joven de origen haitiano, residente en el barrio, ha comenzado a mostrar síntomas preocupantes que incluyen ampollas en la piel y una fuerte picazón. Estos signos han despertado el temor entre los vecinos, quienes, ante la incertidumbre y preocupación por la salud del menor, decidieron contactar al 911 para que le brindara asistencia médica inmediata.
Adolfo Matos, uno de los residentes de la zona, expresó su preocupación y la de sus vecinos, subrayando la importancia de actuar rápidamente: “Es un ser humano, y para que se pierda una vida, él siendo menor de edad, uno es humanitario, por eso llamamos a la autoridad”, comentó Matos, evidenciando la solidaridad y el sentido de comunidad que prevalece en Los Praditos.
La situación se torna aún más delicada debido a que el joven vive en un callejón junto a varias personas, lo que incrementa el riesgo de propagación si se confirma que se trata de un caso de viruela del mono. Aunque hasta ahora no se ha confirmado oficialmente si el joven padece esta enfermedad, la comunidad insiste en que el Ministerio de Salud Pública realice un levantamiento exhaustivo en la zona para descartar cualquier riesgo de contagio masivo.
El ministro de Salud, Víctor Atallah, ha afirmado que, aunque no hay casos activos confirmados en el país en este momento, es crucial mantener la vigilancia epidemiológica. Desde principios de año, se han reportado ocho casos sospechosos de viruela del mono en la nación, todos los cuales resultaron negativos. Sin embargo, las autoridades recomiendan a la población evitar el contacto directo con personas que presenten erupciones cutáneas y continuar con las medidas de higiene, como lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón.
Mientras se espera la confirmación o el descarte de este caso en Los Praditos, el sector se mantiene en alerta, con la esperanza de que las autoridades respondan rápidamente para proteger la salud de sus residentes y evitar la propagación de la enfermedad.