La chismosa

Jorge Arias: 'Cuando Reaccioné, ya Estaba Debajo del Camión' en la Tragedia de Azua

La pequeña comunidad de Bastida, en el municipio de Las Yayas, Azua, vive días de dolor tras una de las tragedias más devastadoras de su historia reciente. Lo que comenzó como una noche de júbilo durante las fiestas patronales terminó en una escena de horror cuando un camión cargado de aguacates perdió el control y se lanzó contra la multitud que se había congregado frente al colmado Gaby, en plena carretera Sánchez.

 

Entre los sobrevivientes, Jorge Arias narra con voz quebrada el momento en que su vida pendió de un hilo. "Cuando reaccioné, ya estaba debajo del camión", recuerda. Jorge, quien había asistido a la celebración con amigos, nunca imaginó que una curva traicionera en la carretera, sumada a la inclinación del terreno, se convertirían en los elementos que marcarían el preludio de la catástrofe.

 

El vehículo, un Daihatsu rojo, irrumpió en la multitud de manera brutal, formando un parachoques humano con las personas que ya había atropellado. Jorge, que apenas logró salir con vida, fue derribado por el impacto de los cuerpos que el camión arrastraba. Entre ellos, su sobrina Génesis Arias, de 24 años, quien lamentablemente no sobrevivió.

La tragedia dejó un saldo de seis personas fallecidas, entre ellas Yan Luis Guzmán, un joven de 32 años miembro de la Policía Nacional, y Elvin Guzmán, de apenas 17 años, oriundo de La Canoa. La conmoción y el dolor se han apoderado de una comunidad que aún intenta comprender y asimilar la magnitud de la pérdida.

El director provincial de Salud Pública en Azua, Joel Montaño, ha advertido que el número de fallecidos podría aumentar debido a la gravedad de algunos de los heridos. En total, 32 personas resultaron lesionadas en el accidente, y varias de ellas se encuentran en estado crítico, luchando por sus vidas.

 

El conductor del camión, identificado como Ángel Encarnación Bautista, huyó del lugar inmediatamente después del accidente, sumando incertidumbre y rabia a una situación ya de por sí devastadora. Las autoridades, encabezadas por el fiscal Juan Diego Ramírez Galván, han retenido el vehículo mientras se investiga si el accidente se debió a una falla mecánica o a la imprudencia del conductor. La senadora de Azua, Lía Díaz, ha hecho un llamado a la reflexión nacional sobre los riesgos que implica la manera en que muchos ciudadanos celebran, a menudo sin considerar las consecuencias para sus propias vidas.

En las calles de Bastida, aún quedan los restos de una celebración que terminó en tragedia: aguacates esparcidos, manchas de sangre, zapatos y otros objetos personales que dan testimonio mudo del horror vivido esa noche. El presidente Luis Abinader ha expresado su solidaridad con las familias afectadas y ha ordenado que se brinde toda la asistencia necesaria a los sobrevivientes y a los seres queridos de las víctimas.

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