Mujer en El Bronx

Un trágico episodio de vi0lencia en El Bronx dejó a Reynaldo Luna, de 63 añ0s, muerto el pasado doming0 después de ser apuñalado por su exnovia Mirda Degracia en su apartamento en Watson Ave. cerca de Evergreen Ave., en el complejo Sotomayor Houses. Las autoridades encontraron a Luna con múltiples heridas de cuchillo en el pecho, tras recibir informes perturbadores de que Degracia había enviado fotos del cadáver mutilado a los amigos de la víctima.

Mirda Degracia, de 52 años, fue identificada por la policía como la responsable del brutal ataque. Después de la agresión, Degracia envió imágenes del cuerpo sin vida de Luna a su cuñado en República Dominicana, quien posteriormente alertó a la familia de Luna. Esto permitió a los familiares rastrear el iPhone de la víctima, confirmando su localización en el hospital.

Luna fue trasladado de urgencia al Centro Médico Jacobi, donde fue declarado muerto. En mensajes de voz, Degracia admitió el asesinato, pidiendo que se enviara una ambulancia y a la policía a su apartamento. "Ella admitió lo que hizo", afirmó John Luna, hijo de la víctima. "No parece que ella tuviera ningún remordimiento".

Reynaldo Luna y Mirda Degracia se conocieron hace décadas en República Dominicana, pero se reencontraron cuando Luna regresó a Nueva York desde Florida. Vivieron juntos durante un par de años antes de separarse en diciembre del año pasado. Tras la ruptura, Degracia comenzó a acosar a Luna, según la familia.

John Luna describió el comportamiento de Degracia como cada vez más obsesivo, recordando cómo se quejaba constantemente de su padre. "Ella decía mucho: ‘Yo era de tu papá antes que de tu mamá’", reveló John. Esta obsesión llegó a tal punto que Degracia incluso retuvo el pasaporte, el teléfono y la cédula de ciudadanía de Luna para impedir que la dejara.

Edely Brioso, sobrina de la víctima, indicó que Degracia amenazaba a Luna y que él comenzó a temer por su vida. "Estaba obsesionada con él", dijo Brioso. "Hay una diferencia entre el amor y la obsesión. Estaba obsesionada".

El día antes del asesinato, Luna había visitado el apartamento de Degracia para reclamar una deuda de $6,000, según relató su familia. Esa visita resultó fatal.

Mirda Degracia fue detenida y enfrenta cargos de asesinato, homicidio involuntario y posesión criminal de un arma. La familia de Luna está devastada por el trágico suceso, con John Luna expresando su incredulidad sobre la muerte de su padre. "Todavía siento que es irreal", declaró.

El comportamiento errático de Degracia nunca fue denunciado a la policía por Luna, quien según su familia, era una persona tranquila que no creía que ella llevaría sus amenazas a cabo. "Tal vez pensó que ella solo estaba hablando", dijo su hermana afligida.

Este caso resalta una preocupante escalada de la violencia doméstica, llevando a un final trágico una relación marcada por obsesión y control.

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