El adolescente, hijo de una pareja de ciudadanos haitianos, fue descubierto sin vida en el canal de riego Ulises Francisco Espaillat por una brigada de la Defensa Civil. La intensa búsqueda que duró cuatro días concluyó con el desgarrador descubrimiento, sumiendo a la localidad en un estado de consternación.
Previo al hallazgo del cuerpo, los familiares de Víctor Juan Obrin lograron recuperar algunas pertenencias, incluida una bicicleta, en las inmediaciones del canal. Este hallazgo sugiere que el joven podría haber estado bañándose en la fuente acuífera antes de su trágico desenlace.
Para esclarecer los hechos y determinar la causa precisa de la muerte del adolescente, el cadáver fue trasladado al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), donde se llevarán a cabo las investigaciones correspondientes. La comunidad, en estado de shock, aguarda ansiosa respuestas sobre las circunstancias que rodearon la pérdida de Víctor Juan Obrin.
La identidad multicultural del joven agrega capas de complejidad a esta tragedia, suscitando reflexiones sobre la importancia de abordar estos eventos con sensibilidad y comprensión. La comunidad se encuentra unida en el dolor, esperando esclarecimiento y justicia ante esta lamentable pérdida.