Carrera ilegal cobra la vida de un joven en la Autovía Juan Pablo II.

Monte Plata – El pasado sábado, la vida de Osvaldo Guzmán, conocido por sus amigos como Tilín, se apagó en un trágico accidente ocurrido en la carretera del Nordeste, a la altura del kilómetro 42 de la Autovía Juan Pablo II, también llamada la "autopista Santo Domingo-Samaná". Osvaldo, quien participaba en una carrera clandestina de motocicletas, perdió el control de su vehículo y fue arrollado por un automóvil que transitaba por la vía, falleciendo al instante debido a la gravedad de las lesiones sufridas.

Este lamentable suceso pone de nuevo en el centro de la discusión la preocupante tendencia de las carreras clandestinas, que se han cobrado la vida de muchos jóvenes en la República Dominicana. A pesar de los esfuerzos por parte de las autoridades para detener esta práctica, la realidad es que estas competiciones ilegales continúan celebrándose en diversas localidades, con consecuencias trágicas.

Osvaldo Guzmán es ahora parte de una dolorosa estadística, dejando atrás a una familia devastada y una comunidad que se pregunta qué más se puede hacer para evitar que otros jóvenes sigan el mismo camino. El Sistema Nacional de Emergencia 9-1-1 respondió rápidamente al llamado de auxilio, pero desafortunadamente no pudieron salvar la vida de Osvaldo.

El incidente ha generado un intenso debate en las redes sociales y en la comunidad sobre la responsabilidad de quienes organizan y participan en estas carreras, así como la necesidad de una mayor intervención de las autoridades para prevenir futuros accidentes. Mientras tanto, los seres queridos de Osvaldo lloran su partida y claman por justicia y medidas más efectivas que pongan fin a estas peligrosas carreras que ponen en riesgo tantas vidas.