bisabuela de 105 años
Stanford, California — Virginia “Ginger” Hislop, una bisabuela de 105 años, ha culminado su trayectoria académica al recibir su título de máster de la Universidad de Stanford, logrando así un hito notable 83 años después de haber dejado sus estudios.
Hislop, quien inicialmente interrumpió su formación en la década de 1940, decidió abandonar la universidad para apoyar a su prometido durante la Segunda Guerra Mundial. Esta decisión, motivada por los desafíos de la época y el compromiso con su pareja, postergó la culminación de su máster por varias décadas.
El acto de entrega del título se celebró en una ceremonia especial en la Universidad de Stanford, donde Virginia Hislop fue reconocida no solo por su perseverancia y dedicación, sino también por su inspiradora historia que conecta generaciones de estudiantes. Con gran emoción y orgullo, recibió su título, rodeada de familiares, amigos y miembros de la comunidad académica.
En la década de 1940, Hislop estaba profundamente involucrada en su programa de estudios cuando la guerra cambió el curso de su vida. Como muchas mujeres de su tiempo, se vio obligada a priorizar las necesidades de la guerra, lo que incluyó apoyar a su prometido y asumir responsabilidades que contribuyeron al esfuerzo bélico.
El retorno de Hislop a Stanford para completar su máster después de más de ocho décadas es un testimonio de su tenacidad y su amor por el aprendizaje. Su historia resuena con un poderoso mensaje sobre la importancia de la educación y la capacidad de superar los obstáculos para alcanzar los sueños, sin importar el tiempo transcurrido.
Marc Tessier-Lavigne, presidente de la Universidad de Stanford, elogió a Hislop durante la ceremonia, destacando su incansable dedicación y espíritu inquebrantable. "Virginia Hislop representa el verdadero espíritu de Stanford: una pasión por el conocimiento que no se apaga con el tiempo y una resiliencia que trasciende generaciones. Su logro es un faro de inspiración para todos nosotros", comentó Tessier-Lavigne.
Virginia “Ginger” Hislop expresó su gratitud y alegría por finalmente obtener su título, subrayando el valor de la perseverancia. "Este título es más que un reconocimiento académico; es un símbolo de mi viaje, de todos los desafíos que he superado y del apoyo inquebrantable de mi familia. Estoy profundamente agradecida por esta oportunidad de cerrar este capítulo de mi vida", compartió Hislop.
La historia de Hislop ha captado la atención tanto de la comunidad académica como del público en general, resaltando que nunca es demasiado tarde para alcanzar los objetivos académicos y personales. Su logro es una celebración no solo de su éxito individual, sino también de la capacidad humana para perseverar frente a la adversidad.
Virginia “Ginger” Hislop continúa viviendo de manera activa y comprometida con su comunidad, siendo un ejemplo vivo de la importancia de la educación continua y el espíritu indomable del aprendizaje a lo largo de la vida.
Este histórico reconocimiento reafirma los valores de la Universidad de Stanford en la promoción de la educación a lo largo de la vida y el apoyo a sus estudiantes, independientemente de las circunstancias. La ceremonia de graduación de Hislop es un recordatorio del poder del conocimiento y la importancia de seguir aspirando a cumplir nuestras metas, sin importar los desafíos que se presenten en el camino.
Para la Universidad de Stanford, este evento marca un hito en su historia, celebrando no solo un logro académico, sino también el legado y la perseverancia de una alumna que ha demostrado que los sueños pueden realizarse a cualquier edad.