A su propio hijo

En un caso que ha conmocionado a la comunidad de Michigan (Estados Unidos), Azuradee France, una madre de 33 años, ha sido condenada a pasar varias décadas en prisión tras admitir haber torturado y asesinado a su hijo ciego de tres años, Chayse Allen, antes de ocultar su cuerpo en un congelador en el sótano de su casa.

France se declaró culpable de asesinato en segundo grado el viernes pasado, según reportó Law & Crime. Inicialmente, fue arrestada en junio de 2022 y enfrentaba múltiples cargos, incluidos asesinato con premeditación, abuso infantil, tortura y ocultación de una muerte. Sin embargo, en un acuerdo de culpabilidad, los otros cargos fueron desestimados a cambio de su declaración de culpabilidad por el homicidio de su hijo. El fiscal del condado de Wayne explicó que el acuerdo también incluía una sentencia de 35 a 60 años en una prisión estatal. “Los hechos presuntos en este caso han asombrado incluso a los más curtidos”, declaró el fiscal a Law & Crime, refiriéndose a la naturaleza espeluznante del caso.

Los hechos ocurrieron el 24 de junio de 2022, cuando agentes del Departamento de Policía de Detroit respondieron a un llamado de control de bienestar de un menor en la cuadra 12760 de Monte Vista. Al llegar a la escena, encontraron “los restos de un niño fallecido”, identificado posteriormente como Chayse, dentro de un congelador. La madre fue detenida y llevada al centro de detención de Wayne. El Jefe de Policía de Detroit, James E. White, también habló sobre el impactante descubrimiento: “Lo que encontraron los oficiales dentro de la casa de France fue algo que nadie debería tener que ver”. “Solo imagino lo que los otros niños debieron haber pasado y lo que debieron haber soportado estando dentro de esa casa”, agregó White a People.

Cuando los policías hablaron con France, notaron que algo no estaba bien en la forma en que se comunicaba y cómo intentaba repetidamente alejar a los agentes de policía y de Servicios de Protección Infantil como si nada estuviera sucediendo. “Sin embargo, los oficiales sabían que algo andaba mal, lo que los llevó a registrar la casa y descubrir el cuerpo de Chayse”, informó White a Law & Crime.

En su declaración ante la policía, la mujer indicó que una noche de marzo de 2022 se sintió frustrada con el menor porque este último se negaba a comer, lo que la llevó a golpearle con un cinturón y patearlo en el pecho al menos una vez. Cuando ella fue a revisarlo a la mañana siguiente, el niño estaba muerto. Temiendo que la policía le quitara a sus otros hijos, la acusada decidió no llamar al 911 y, en cambio, puso el cuerpo de Chayse en una bolsa y lo llevó al congelador del sótano.

France está programada para ser sentenciada el próximo 29 de julio. Esta resolución trae un cierre a uno de los casos más macabros recientes, poniendo en relieve la importancia de la vigilancia y la protección infantil.

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